Claramente, la soja en todas sus formas se está incluyendo en un número cada vez mayor en las fórmulas comerciales de comida para perros y gatos.
A menudo se ha planteado el problema de la soja en alimentos para mascotas, pero ya es hora de mirar más a fondo lo que es la soja, los problemas de salud que puede crear, por qué es utilizada por muchos fabricantes de alimentos para mascotas y por qué no deberías alimentar a tu perro o gato con ella.
Estudios sobre problemas de salud con el uso de soja[]
Loros en Nueva Zelanda: canarios en la mina de carbón* []
En 1991, un abogado estadounidense rico llamado Richard James vivía con su esposa en Nueva Zelanda. El sueño de jubilación de James era el de criar aves exóticas ‘allá abajo’ (Australia).
La pareja quería alimentar a sus animales exóticos con la mejor dieta disponible.
Las habas de soja estaban siendo fuertemente comercializadas en los EE.UU como un nuevo alimento maravilloso, así que James ofreció soja como alimento a las aves jóvenes.
Los loros no comen habas de soja en estado salvaje. Y el resultado para la bandada de James fue desastroso.
Algunas de las aves se volvieron infértiles. Muchos murieron. Los machos jóvenes alcanzaban la pubertad más temprano y envejecían prematuramente.
James consultó al Dr. Mike Fitzpatrick, un consultor toxicólogo en un laboratorio de Nueva Zelanda. James le dijo a Fitzpatrick que estaba seguro de que las habas de soja estaban matando a sus aves. Fitzpatrick pensó que James estaba equivocado, pero decidió investigar, porque estaba ocurriendo una obvia disrupción hormonal en los loros, y él había eliminado de la ecuación la posibilidad de otros disruptores hormonales químicos como los pesticidas.
Dr. Fitzpatrick fue estudiando acerca de la soja y sus efectos. Descubrió que la soja contiene toxinas y poderosos estrógenos vegetales capaces de romper los ciclos menstruales femeninos. También pareció dañar el tiroides.
Guepardos de Norte América: Más canarios en la mina de carbón[]
Aproximadamente hace 30 años, se llevó a cabo la cría en cautividad de los guepardos de América del Norte para revertir una crisis de la población dentro de la especie.
Pero en 1985, 29 guepardos en zoológicos estadounidenses murieron, muchos de ellos de enfermedad hepática. Sólo habían nacido 18, y 7 de ellos murieron antes de llegar a la edad adulta.
Tan sólo el 10 % de los guepardos hembra adultos que vivían en cautiverio en América del Norte producían cachorros vivos en la década de los 80. Sin embargo, en otros países, la norma era del 60-70%.
¿La diferencia? Los guepardos que vivían y se reproducían con éxito en otras partes del mundo fueron alimentados con carcasas de animales enteros. Los guepardos norteamericanos fueron alimentados con una dieta felina comercial de carne de caballo y soja.
Los investigadores de Ohio estudiaron la comida que estaban comiendo los guepardos norteamericanos. Encontraron la porción de soja de la dieta que contenía estrógenos similares a las hormonas que se encuentran en las hembras de los mamíferos.
Cuatro guepardos en un zoológico de Estados Unidos fueron cambiados a una dieta de carne de pollo y sin soja. La función hepática mejoró, sin embargo, el que los guepardos pudieran volver a ser fértiles y se volvieran a reproducir con éxito, no se podía confirmar.
Los investigadores plantearon que los guepardos eran probablemente extrasensibles a los efectos de los estrógenos de las plantas debido a la endogamia (el resultado de una crisis en la población anterior). Sin embargo, la cantidad de soja en su dieta era relativamente pequeña, lo que llevó a los científicos a la conclusión de que todos los felinos, probablemente, tenían dificultad para eliminar el exceso de estrógenos de sus cuerpos.
La diferencia entre soja "segura" y demasiada soja[]
Solamente la gente que ha estado viviendo aislada del mundo los últimos 30 años se ha perdido las campañas masivas de marketing promocionando los beneficios en la salud de los productos de soja. Se estima que la industria de la soja estadounidense gasta al menos $ 80 millones al año para promover el consumo de soja en todo el mundo.
Todo esto a pesar de la evidencia documentada de las propiedades “anti-salud” de la soja, tanto en animales como en humanos.
Los estrógenos vegetales, también llamados fitoestrógenos, producen efectos biológicos en los seres humanos. En la proteína de soja, el más común de estos compuestos son las isoflavonas.
La soja se procesa de manera que afecta al nivel de fitoestrógenos. La fermentación tradicional reduce los niveles de isoflavonas de manera espectacular, sin embargo, el procesamiento en la fábrica no.
Las habas de soja maduras y crudas no sólo contienen fitoestrógenos, sino también los fitatos que impiden la absorción de los minerales y sustancias que bloquean las enzimas necesarias para digerir la proteína. La soja también contiene otros anti-nutrientes, incluyendo:
- Antígenos en forma de proteínas no desnaturalizadas que puede causar reacciones alérgicas graves en animales y personas.
- Inhibidores de la tripsina que impiden la acción de enzimas proteolíticas en el tracto gastrointestinal, reduciendo la digestibilidad de las proteínas.
- Oligosacáridos indigeribles - azúcares que causan flatulencia y diarrea
- El ácido fítico, que puede interferir con el uso del cuerpo de minerales esenciales como el calcio, magnesio, hierro y zinc.
La soja en las dietas tradicionales orientales ha sido fermentada por períodos largos (18 meses de media) con moldes, cultivos u otras sustancias que alteran radicalmente su bioquímica. Esta transformación a través de la fermentación reduce el impacto de los anti-nutrientes, al tiempo que hace que los aminoácidos de la soja estén disponibles para su uso por el cuerpo.
El procesamiento en la fábrica, por el contrario, comienza desgrasando la proteína de soja en lugar del haba entera. La comida se produce mediante un proceso de trituración. Las habas crudas se trituran en finos copos. Estos se mezclan con un disolvente de hexano a base de petróleo para extraer el aceite de soja. Los copos residuales se tuestan y se muelen convirtiéndolos en comida de soja o harina de soja, los cuales terminan en alimentación animal.
El aceite de soja es limpiado, blanqueado, desgomado y desodorizado.
En la salsa de soja "elaborada naturalmente", la proteína de soja ha sido procesada y se ha mezclado con las esporas del moho y a altas temperaturas durante 3 a 6 meses.
Ordinariamente, la salsa de soja no elaborada tarda sólo 2 días en producirse. La harina de soja se mezcla con ácido clorhídrico a altas temperaturas, bajo presión, y el resultado es proteína vegetal hidrolizada. Se utilizan varios conservantes y aditivos para mejorar el color y el sabor. Este método emplea el uso de la enzima glutaminasa, que a su vez produce grandes cantidades glutamato en glutamato monosódico.
¿Por qué debemos evitar los alimentos para mascotas que contienen productos de soja?[]
La soja y los productos relacionados con la soja se encuentran en un creciente número en las fórmulas de alimentos para mascotas disponibles en el mercado, tanto seco como semi-húmedos y húmedos, incluyendo muchos bellamente anunciados, grandes marcas, así como fórmulas veterinarias y dietas de prescripción.
La soja es una proteína vegetal utilizada por compañías de alimentos para mascotas para aumentar el contenido de proteínas y abultar. Debido a que las proteínas vegetales son menos costosas que las proteínas de la carne, los fabricantes de alimentos para mascotas las utilizan para aumentar su beneficio.
La etiqueta de los ingredientes ni siquiera podría decir de soja, ya que aparece comúnmente como caldo de verduras, proteína vegetal texturizada o TVP, o tal vez con otros nombres.
La mayoría de los expertos en nutrición de mascotas están de acuerdo de que la soja no es una buena nutrición para gatos o perros. Se considera de baja calidad, proteínas incompletas bien conocidas por crear alergias alimentarias en los animales domésticos.
Según Sally Fallon y Mary G. Enig, PhD, autores de El Lado Oscuro de la Cenicienta:
"La soja contiene grandes cantidades de toxinas naturales o "antinutrientes". La primera de ellas son potentes inhibidores de enzimas que bloquean la acción de la tripsina y otras enzimas necesarias para la digestión de las proteínas."
Se realizó un estudio en 2004 en la Universidad de Pennsylvania para determinar la cantidad de fitoestrógenos en 24 alimentos de perro comerciales aleatorios. Los resultados revelaron que en todos los alimentos que contienen ingredientes de soja, había concentraciones de fitoestrógenos en cantidades suficientemente grandes para tener un efecto biológico sobre la salud de las mascotas.
La soja se ha vinculado a gases y a dilatación estomacal en perros. Tiene un alto contenido en purinas, por lo que es una fuente de proteína completamente inapropiada para perros con cristales de urato. También es alta en silicatos y promueve la formación de piedras de sílice.
La acción de los carbohidratos de la soja puede causar un aumento de azúcar en la sangre en muchos gatos. La soja también está vinculada a daños en el tiroides, y como el hipertiroidismo es común en gatos, ésta es otra razón por la que no debería formar parte de la dieta de un felino.
La ingestión de productos de soja también está vinculada a las convulsiones en los perros y los gatos.
Esperamos haberte dado razones convincentes sobre por qué evitar los alimentos para mascotas que contienen productos de soja.
Los riesgos potenciales asociados con la alimentación de la soja son simplemente inaceptables, sobre todo si tenemos en cuenta que su gato o perro carnívoro prefiere y recibe un nivel nutricional mucho más alto con fuentes de proteína animal.
- (Para aquellos que no están familiarizados con la expresión "canarios en la mina de carbón," de WiseGeek:
"La vida de un canario real en una mina de carbón se podría describir en tres palabras:" corta pero significativa ". Las minas de carbón antiguas no contaban con sistemas de ventilación, por lo que los mineros traían regularmente un canario enjaulado en nuevas vetas de carbón. Los canarios son especialmente sensibles al metano y al monóxido de carbono, lo que los hace ideales para detectar cualquier acumulación de gas peligroso. Mientras el ave seguía cantando, los mineros sabían que su suministro de aire era seguro. Un canario muerto marcaba una evacuación inmediata.")
Bibliografía[]
Becker, K. (28 de 03 de 2012). Here’s One Protein Dog and Cat Owners Should Steer Clear Of. Recuperado el 21 de 5 de 2016, de Mercola: https://healthypets.mercola.com/sites/healthypets/archive/2012/03/28/avoid-using-soy-on-pets.aspx.
Cerundolo, R., Court, M., Hao, Q., & KE., M. (2004). Identification and concentration of soy phytoestrogens in commercial dog foods. NCBI , 65(5):592-6.
Fallon, S., & Enig, M. G. (s.f.). Newest Research on Why You Should Avoid Soy. Recuperado el 21 de 05 de 2016, de Mercola: https://www.mercola.com/article/soy/avoid_soy.htm